Ciencia | Ecología
30 de septiembre de 2013

Aptitud de agua de laguna para riego

Prof. Viviana COLASURDO y Lic. Oscar DIAZ

El territorio de la Provincia de Buenos Aires, presenta cuerpos de agua permanentes y/o temporarios someros y de variada extensión denominados lagunas, que constituyen una de las formas de paisaje más conspicuas de la planicie bonaerense. Son ecosistemas naturalmente eutróficos (1) de aguas claras con predominio de macrófitas (2) o elevada turbidez tanto de origen orgánico como inorgánico; incluso algunas poseen como peculiaridad, la alternancia entre el estado claro y el turbio, con cortos períodos de tiempo de transición. Tienen como particularidad la elevada dinámica de su nivel hidrométrico originado por las constantes fluctuaciones temporales de las precipitaciones que generan momentos de seca e inundación.

Las características hidroquímicas de estos cuerpos de agua están influenciadas por variables ambientales de la cuenca: ubicación geográfica, climatología, geología, vegetación y actividades humanas como uso del suelo y asentamientos, entre las principales.  

Los excesos de agua retenidos en las lagunas pampeanas podrían ser empleados para riego en momentos de necesidad, siempre en el marco establecido por la Ley 12257, Código de Aguas de la Provincia de Buenos Aires. En términos generales, desde el punto de vista agrícola, son escasas las situaciones en la provincia de Buenos Aires en que se utiliza el agua de las lagunas para riego. En muchas circunstancias el productor agropecuario desconoce la calidad potencial para ello.

Evaluar la calidad del agua de las lagunas, para contemplar o no la posibilidad de utilizarla para riego, contribuye a una adecuada planificación del uso integral del agua en su conjunto, disminuyendo la presión de extracción ejercida sobre el agua subterránea y en el caso de la laguna, optimizar su aprovechamiento basado en sus potencialidades y aptitudes.

Para evaluar la calidad del agua para ser utilizada en irrigación, no sólo es importante conocer la concentración de sales presentes sino también su composición en cuanto al tipo de cationes y aniones (3) que contiene. El efecto de su aplicación también depende de otros factores como son el tipo de suelo, el cultivo a regar y las condiciones climáticas. Los criterios más importantes para clasificar a un agua para riego y el peligro potencial en su uso son: salinidad, concentración de sodio y bicarbonato en el agua por las posibles consecuencias en el suelo, toxicidad de iones presentes en ella y potencial osmótico. (4) Aguas de riego con alto contenido de sólidos disueltos contribuyen a la acumulación de sales en el suelo, en la zona radical, reduciendo así la disponibilidad de agua para las plantas por aumento del potencial osmótico. La acumulación de sodio en el suelo causa deterioro en su permeabilidad y estructura, interfiriendo en el drenaje y la aireación requerida para el crecimiento de la planta.

La decisión a aplicar una determinada agua de riego necesita ser evaluada, no solamente teniendo en cuenta la calidad del agua, sino también en las condiciones que va a ser utilizada, es decir, considerando el cultivo a regar, propiedades del suelo, accesibilidad a la misma y características climáticas, entre otras.

Como ejemplo se puede mencionar  el estudio realizado en la laguna De los Padres, de 220 ha de superficie, ubicada en el cinturón frutihortícola de la ciudad de Mar del Plata, a partir de muestreos realizados entre los años 2004 y 2006. El agua de la laguna De los Padres se caracteriza por poseer un contenido de sales elevado para su utilización en riego y por ser bicarbonatada-sódica. Sus excesos podrían ser empleados para riego suplementario en el cinturón hortícola de Mar del Plata, teniendo en cuenta que las características de drenaje de los suelos y la cantidad de lluvias que se registran en esta región, pueden ser suficientes para lograr el lavado de sales, y que son aguas con menor contenido salino que las subterráneas que se emplean actualmente para regar la zona. Hay que considerar que la aplicación al riego de aguas de salinidad media es factible siempre que se realice un monitoreo periódico de salinidad del suelo.

Los datos obtenidos pueden ser interesantes como punto de partida para realizar investigaciones en las que se avance sobre resultados concretos de la aplicación del agua de la laguna para riego de los cultivos, en el marco de la calidad del suelo de la zona, de los cultivos más importantes que se realizan en el cinturón hortícola implicado y de las condiciones climáticas de la región, ya que, tal como fuera mencionado, son variables determinantes para definir si la calidad del agua es adecuada para utilizarla para riego.

El destino de riego que podría darse al agua de laguna debe ser abordado en un marco de gestión integral del recurso hídrico, a modo de complemento de riego a partir del acuífero, en momentos de excesos hídricos superficiales, y con una constante evaluación del impacto de la extracción de agua de laguna sobre el mismo ecosistema, determinando época del año y volumen, y principalmente la cota mínima sobre la cual permitir la acción.

Notas:

1. Eutróficos: cuerpos de agua que muestran eutrofización.

2. Macrófitas: son plantas acuáticas que crecen dentro o cerca del agua y pueden ser emergentes, flotantes o sumergidas. En las lagunas, las macrófitas proveen refugio a los peces y sustrato para invertebrados, producen oxígeno y alimento a la fauna presente. Un decrecimiento de la población de macrófitas de una laguna generalmente indica problemas en la calidad de agua.

3. Cationes, Aniones: un catión es un átomo  o conjunto de átomos que ha perdido uno o más electrones, adquiriendo carga positiva. Un anión  es un átomo o conjunto de átomos que ha ganado uno o más electrones, adquiriendo carga negativa. Los iones se unen por la atracción entre sus cargas opuestas. La mayoría de las sales, cuando se disuelven en agua, conforman una solución constituida por iones, cationes y aniones.

4. Potencial osmótico:   El potencial osmótico representa la capacidad de disminución de desplazamiento del agua desde el suelo hacia la planta,  debido a la presencia de especies químicas disueltas.

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Prof. Viviana COLASURDO:
Profesora en Física y Química, Especialista en Enseñanza de las Ciencias Experimentales. Profesora Adjunta, Facultad de Ingeniería, UNICEN, Investigadora de ECOSISTEMAS, Grupo de Recursos Hídricos.
Contacto: vcolasur [at] fio [dot] unicen [dot] edu [dot] ar
Lic. Oscar DIAZ:
Licenciado en Química, Especialista en Ciencias  Químicas  y Ambiente, Especialista en Enseñanza de las Ciencias Experimentales Profesor Titular, Facultad de Ingeniería, UNC, Investigador de ECOSISTEMAS, Grupo de Recursos Hídricos.
Contacto: odiaz [at] fio [dot] unicen [dot] edu [dot] ar