Presentaron en UNICEN la Ley de Música y el libro Otro Cantar
Un interesante encuentro de mucha utilidad para los músicos locales, cualquiera sea el estilo que ejecuten, tuvo lugar el pasado sábado en el Aula Magna de la Universidad Nacional del Centro, organizado por MITO (Músicos Independientes de Tandil Organizados) y la Secretaría de Extensión de la UNICEN.
El eje fue la Ley Nacional de Música que fuera aprobada por unanimidad a fines del año pasado luego de una intensa lucha por parte de diferentes artistas a nivel nacional y legisladores. A la hora de llegar al Congreso, el proyecto contó con el voto positivo de todos los sectores. Dos de los impulsores de esta legislación, Diego Boris y María Claudia Lamacchia (ésta redactó el anteproyecto junto al sociólogo Horacio González, presidente de la Biblioteca Nacional) fueron quienes visitaron Tandil para exponer sobre diferentes tópicos ante un auditorio conformado especialmente por músicos y, como autoridad universitaria, el secretario Daniel Herrero.
Boris –lidera una banda de rock llamada La Resistencia- se ha dedicado durante más de una década a la autogestión en este campo y fue el encargado de hacer el sábado una síntesis de la ley y, lo más interesante, el grado de aplicabilidad concreta en un ámbito como Tandil donde existe una movida musical cada vez más grande.
Los segmentos más trascendentes tuvieron que ver con la creación del Instituto Nacional de Música destinada al fomento de los artistas, a la conformación de los Centros de Producción Musical y al financiamiento y utilización de los recursos, detalles que se pueden encontrar en www.umiargentina.como o en el facebook de MITO.
Previamente, María Lamacchia expuso sobre el libro Otro Cantar, de su autoría, tras una introducción del periodista Julio Varela en representación de la Secretaría de Extensión. Dicha obra es una pormenorizada visión sobre la Música Independiente en la Argentina, tanto en sus aspectos históricos (desde la década del 60, con el nacimiento del rock nacional y el desarrollo en los años siguientes) como en todo lo atinente a los trabajos de autogestión, ya sea en lo que hace a la producción, grabación, distribución, arte de tapa de las placas, etc.
Otro Cantar respira la filosofía de todos esos momentos de agitación en el campo cultural y se relata con una pluma ágil y precisa el funcionamiento de la industria de la música en su dimensión simbólica pero también económica.
Ambos visitantes terminaron respondiendo preguntas del público, lográndose un rico debate bajo la consigna que “los derechos no se recitan, sino que se conquistan”, tal el lema lanzado por la Federación Argentina de Músicos Independientes.