Desde la Secretaría de Extensión valoramos el acompañamiento de toda la UNICEN, que es nuestra casa; de las comunidades de Tandil, Azul, Olavarría y Quequén; y de todas las organizaciones e instituciones con las que trabajamos en los diferentes territorios.
Deseamos que el próximo año nos vuelva a encontrar en un abrazo colectivo con la firme convicción de seguir construyendo una educación pública de calidad para la región.
Y como lo imaginó Eduardo Galeano en “El libro de los abrazos”, deseamos también que en 2025 nuestros fuegos sigan alumbrando, como desde hace años, el camino del compromiso social universitario que tanto orgullo nos da.
“Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende”.