Tratamiento del cáncer en los animales de compañía: El respeto por la calidad de vida
En los últimos años, la esperanza de vida de los animales de compañía se ha incrementado. Perros y gatos viven más tiempo gracias a los avances de la medicina veterinaria y los cuidados de sus propietarios. Pero vivir más tiempo tiene un precio, y el precio que hay que pagar está relacionado con la aparición de enfermedades propias del envejecimiento y el cáncer ocupa el primer lugar entre ellas. El perro es reconocido como un modelo para la investigación del cáncer humano ya que los tumores en ambas especies se desarrollan y evolucionan de la misma manera. Esto ha generado importantes avances en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad. Hoy los veterinarios contamos con herramientas que no estaban a nuestro alcance una década atrás.
El diagnóstico de un tumor en un animal de compañía suele ser un momento de mucha angustia para la familia. La palabra tumor o cáncer, está asociada a sufrimiento y a la posibilidad de una muerte cercana. Pero cáncer, no es un sinónimo de muerte. El cáncer es una enfermedad crónica que puede ser controlada. Existen una gran variedad de tumores y todos se comportan de manera diferente. Algunos de ellos se pueden controlar por mucho tiempo, dando al paciente una buena calidad de vida. Para definir una estrategia de tratamiento, necesitamos conocer contra quien vamos a pelear: el tipo de células que lo componen, su grado de agresividad, dónde se encuentra y dónde se esconde. Para ello, se deben seguir una serie de pasos ordenados para obtener toda la información.
La biopsia para conocer contra quién vamos a pelear
Para poder predecir el comportamiento del tumor se utiliza la biopsia, que consiste en obtener un fragmento del tejido tumoral para analizarlo. Los resultados de la biopsia van a indicar el nombre del tumor y también su grado de agresividad.
Estadificación para conocer dónde se encuentra y dónde se esconde
Para conocer la extensión de la enfermedad se utilizan métodos de diagnóstico por imágenes que incluyen ecografía, radiografía y tomografía. Estos datos son importantes, para poder establecer si el tumor es único y está localizado, o bien si existen tumores metastásicos que se han desprendido del tumor principal y se esconden en los ganglios u otros órganos.
Planificación del tratamiento
Con los datos de la biopsia y los datos de la extensión del tumor se puede planificar el tratamiento. Hay tumores que se curan sólo con cirugía, otros se controlan con quimioterapia y otros necesitan de ambos tratamientos en combinación. El tratamiento se planifica teniendo en cuenta que el tumor crece en el paciente. En consecuencia, es necesario evaluar con cuidado cual es el mejor tratamiento para el tumor, el mejor tratamiento para el paciente y el mejor tratamiento para la familia.
El mejor tratamiento para el tumor
Para cada tumor hay un tratamiento específico. El tratamiento depende de muchos factores relacionados al tipo tumoral, a la localización y a la extensión en el organismo.
El mejor tratamiento para el paciente
Cada paciente es único y al iniciar un tratamiento es fundamental pensar en su bienestar. El objetivo del tratamiento está orientado a mantener o mejorar la su calidad de vida.
El mejor tratamiento para la familia
Cada paciente es único, como así también cada familia. El tratamiento oncológico es un trabajo en equipo donde la dedicación y el cuidado de la familia representan una parte significativa del éxito.
El tratamiento del cáncer en los animales ha evolucionado de manera paralela al tratamiento de esta enfermedad en los humanos, pero con ciertas diferencias. En los humanos, muchos tumores tienen cura y las personas curadas pueden disfrutar de décadas de una vida confortable. El tratamiento del cáncer en los humanos es agresivo, por esta razón, durante el mismo se evidencian severos efectos adversos. En contraste, la calidad de vida es el principal objetivo del tratamiento en los animales en todo momento. Los tratamientos no producen efectos adversos porque están dirigidos al control de la enfermedad, evitando las internaciones y haciendo que el paciente se sienta tan normal como sea posible y sus propietarios puedan disfrutar de su compañía por más tiempo.
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